Hay una serie de indecentes
que intentan volverme loco
para quedarse con mi herencia.
Entre ellos hay familiares
muy directos y amigos de ellos,
como puden ser psiquiatras,
médicos, enfermeros,
y muchas personas que trabajan
en el hospital de Salamanca.
He pasado unos años
manipulado por esta gente.
Tengo la mandíbula desencajada
y eso me ocasiona unos fortísimos
dolores de cabeza,
que ni el nolotil me los palia.
Creí que por la sintomatología
podía deberse a una sinusitis
que padecí desde muy niño,
pero no es eso,
es que tengo la mandíbula desencajada
y eso hace que tenga unos dolores
muy fuertes de cabeza.
Hablo para Michel Moore y los suyos,
para que vean lo degenerado que está
nuestro sistema sanitario.
Hay una serie de indecentes,
que trabajan por horas,
a los cuales un superior
les dice que a determinadas personas
hay que tratarlas de determinada manera.
Una serie de indecentes
pagan a otra serie de indecentes
con drogas como la cocaína
para que esos indecentes
que trabajan en hospitales
como el de Salamanca,
den diagnósticos equivocados.
Le he dado muchas vueltas
a todo este asunto,
y he podido comprobar
como personas adictas a la cocaína
eran manipuladas para dar diagnósticos erróneos.
Hay una serie de indecentes en este país
que tienen el control del narcotráfico
y enganchan a todo el mundo
para hacer lo que les venga en gana.
Yo hablo para Mickel Moore y su gente,
para la gente indignada con su médico o especialista,
hablo de que hay una serie de indecentes
que hacen lo que quieren con los pacientes.
Continuará
