domingo, abril 17, 2005

LIMPIEZA

Señoras de la limpieza,
ahora que os veo, reveo,
aclaro mis ideas y os pido
que limpiéis las raíces podridas y secas
que anidan en los monos cuadrados de cabeza
que no se creen sino la aspereza,
pereza de pensar,
limpieza de todos los cocos
colosos porosos del detrimento,
me encuentro,
en la cafetería de vuestra limpieza,
belleza al unísono de vuestra escoba,
que limpia que limpie
sus nebulosos corazones,
sinrazones de sus propios delirios,
lirios de su Edén particular,
anular de las civilizaciones,
papelotes y rebotes con el camarero.
Tira SIDA al suelo.

Oviedo 1991

No hay comentarios:

Publicar un comentario